Señala Perelló, que en la actualidad, es frecuente el discurso sobre el desarrollo local basado en el turismo y, como punto de partida, la premisa cierta de que son los territorios los principales protagonistas involucrados en la creatividad y la innovación.
Ambos conceptos están encaminados a la recuperación o concepción de proyectos de desarrollo económico, basados en las potencialidades de la industria de los viajes.
En este sentido, dice el estudioso, resulta válido reconocer que la visión del desarrollo local reivindica la importancia de los pequeños y medianos emprendimientos del territorio como construcción social y representa lo que se llama Endógeno al proceso de desarrollo.
Sobre el particular, apunta en particular al denominado turismo de pequeña escala.
Para sus análisis, predomina un enfoque crítico frente al discurso hegemónico que ve en el turismo solo un factor de crecimiento económico y un elemento clave para el desarrollo. Ello contribuye a mejorar las condiciones de vida.
Dichos casos, resaltan que los trabajos abordan tanto la problemática de la desigualdad social, como la cuestión medioambiental y cultural, mostrando el desarrollo del turismo, en un marco de brutal competencia global y desregulación.
Reseña que se trata de una administración local en un territorio jurídicamente determinado. Menciona que se trata de un sector asociado a la producción de condiciones económicas, sociales, ambientales y culturales concretas. Más adelante refiere, que el turismo, por sí solo, no desarrolla ningún territorio, pero puede contribuir a la prosperidad local si se concibe como un instrumento de inclusión, de encadenamientos y dinamización social, ambiental y económica.
Pone entre varios ejemplos, la experiencia de buenas prácticas del proyecto de Desarrollo Local Pintura Mural en Homenaje al escritor Ernest Hemingway, en Cojímar, La Habana, que actualmente se incluye en los recorridos turísticos desde la capital y recibió premio.
En este espacio geoturístico, confluyen armónicamente conceptos ambientales, históricos, artísticos y estéticos que, respetando las regulaciones urbanísticas, rescata el patrimonio histórico.
Precisamente las autoridades en Cuba promueven los desarrollos locales en varios sentidos, sobre todo alimentarios y agrícolas, ahora con un nuevo concepto desde el punto de vista turístico.